La educación a la que estamos acostumbrados, la educación tradicional está basada en la memorización. Se centra únicamente en los resultados y en los contenidos. Es la educación que Kaplún denominó bancaria. El educador deposita los conocimientos en la mente del alumno y el resultado es que el alumno no aprende, memoriza y olvida rápidamente.
A los profersores se les critica de los malos resultados de los alumnos, de si los contenidos de las materias que transmiten son las más adecuados. Sin embargo, tienen que hacer frente a las políticas educativas impuestas y no se les dota de apoyos ni medios suficientes para que puedan desarrollar correctamente su tarea. Esto contribuye a que los alumnos no nos identifiquemos con ellos.
Respecto a la educación que yo he recibido, en general no estoy satisfecha y considero que la mayoría de los educadores que he tenido han sido profesores que no me transmitían interés por las materias y que he considerado bastante injustos, en el sentido que había que aceptar su punto de vista "sin derecho a réplica".
Desde pequeña la asignatura que más aborrrecí ha sido lengua y literatura, ya que lo importante era saber los textos al pie de la letra, hasta que en cuarto de la ESO tuve la suerte de tener a un magnífico profesor llamado Luis Alfredo. Éste nos motivaba e incitaba a que leyésemos, transmitiéndonos la pasión que él sentía por la literatura. Lo que más le importaba era que fuésemos mejores personas. En mi opinión, posee todas las caractéristicas que un buen profesor tiene que tener: autoridad, cordialidad, paciencia, entusiasmo, motivación y una muy buena preparación. Ese año leí libros. textos, poemas...que jamás se me hubiera pasado por la cabeza leer. Este profesor no sólo consiguió que obtuviese unos expléndidos resultados, sino que lengua y literatura pasó a ser una de mis asignaturas favoritas.
Nunca se me ha dado bien el inglés, entre otras cosas debido a la educación que tuve en el colegio que era muy penosa, a base de memorizar vocabulario. Las clases me parecían una tortura hasta que me apunté a clases de refuerzo con Lola. Me enseñó la asignatura a base de juegos, de una forma entretenida y divertida. Actualmente mi inglés sigue siendo muy básico, pero Lola, con la que sigo en contacto, ha sido un pilar muy importante en mi educación y no me refiero sólo a mi aprendizaje escolar, sino a mi formación como persona. Como plantea el autor, educar es "comunicar el afecto, es también ayudar a construir sensibilidad, fomentar la creatividad, formar en la autoestima y enseñar a mirar el mundo desde la emoción y, al mismo tiempo, dar estímulos para que la propia persona sepa canalizar esas emociones y vivir en sociedad"(García Matilla, 2003).
Los medios de comunicación hoy son imprescindibeles y deben formar parte de la educación.
Los emisores-receptores, los emerec que proponía Cloutier, se ha hecho realidad con las redes sociales que promueven intercambios de comunicación global.
Los medios de comunicación de masas, como la radio y la televisión, unidos a los sistemas de información, internet, telefonía...deben ser utilizados para difundir y compartir enseñanza, por lo que es necesario recuperar el concepto de servicio público de los medios.
Freinet considera que el aprendizaje de los alumnos surge a partir de las propias experiencias, de la manipulación de la realidad, de la expersión de sus vivencias, dentro de un ambiente en el que los alumnos puedan formular y expresar sus experiencias.
Freire teoriza sobre la importancia de una alfabetización que denomina "concientizadora". Para Freire alfabetizar es mucho más que aprender a leer y a escribir, es una forma de toma de conciencia que pone el énfasis en el proceso educativo que vincula pensamiento y lenguaje y que no se centra en los contenidos o los resultados del aprendizaje.
Kaplún fue un escritor y educomunicador, ya que no se limitaba a producir y difundir, sino a educar, a promover el pensamiento crítico. Para Kaplún "la verdadera comunicación no está dada por un emisor que habla y un receptor que escucha, sino por dos o más seres o comunidades humanas que intercambian y comparten experiencias, conocimientos, sentimientos (aunque sea a distancia, a través de medios o canales artificiales).
Es a través de este proceso de intercambio como los seres humanos establecen relaciones entre sí y pasan de la existencia individual aislada a la existencia social comunitaria. Para Kaplún, los medios masivos tal como operan actualmente en su casi totalidad no son medios de comunicación sino medios de información o de difusión. Podrán llegar a ser realmente de comunicación, y de hecho algunos pocos ha logrado y demostrado serlo, pero para ello tendrán que transformarse profundamente.
Para este educomunicador el proceso de la comunicación debe realizarse de modo que dé a todos la oportunidad de ser alternativamente emisores y receptores. "Definir qué entendemos por comunicación equivale a decir en que clase de sociedad queremos vivir".
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